Tipos de hornos: características y en qué casos usarlos
¿Sabías que no todos los hornos son iguales? Te lo vamos a demostrar. Para ayudarte a encontrar el horno ideal para tus necesidades te vamos a mostrar un listado con los principales tipos de hornos. No solo te vamos a informar sobre los mismos, también te vamos a mostrar sus características y los usos más comunes. Así te será más fácil encontrar el horno que realmente se adapte a lo que estás buscando.
Tipos de hornos más utilizados
Vamos a mostrarte los hornos más utilizados con el objetivo de que los puedas conocer. Dependiendo del uso que les vayas a dar deberás optar por una u otra alternativa.
1- Horno industrial
Es uno de los electrodomésticos más importantes dentro del ámbito de las cocinas de hostelería y de las cocinas industriales. Sin lugar a dudas, una cocina profesional siempre debería contar con este tipo de horno para poder sacar los pedidos adelante y sin problemas.
En la actualidad podemos encontrar una amplia variedad de hornos industriales entre los que elegir. En LaHostelera podrás encontrar un amplio catálogo de hornos industriales de diferentes marcas. No importa el tipo de cocina de hostelería del negocio, hay hornos para todo tipo de necesidades. Igual podrás conocer hornos pequeños hasta hornos con grandes capacidades.
Dentro de los hornos industriales podemos encontrar los modelos mixtos. Este tipo de horno destaca por ser la combinación de un horno de convección y cocción. Gracias a esas dos cosas podrás tener la certeza de que el horno te permitirá elaborar una amplia variedad de platos en la cocina profesional.
2- Horno de microondas
Este horno de microondas es ideal para calentar o descongelar alimentos ya cocidos. Además, ofrece la posibilidad de preparar salsas, palomitas, sopas, alimentos precocidos y recetas que involucren gratinado o fundido de ingredientes. Funciona mediante electricidad y emite ondas electromagnéticas a una frecuencia de 2,45 GHz.
Por lo general, tiene dimensiones estándar de aproximadamente 43-45 cm de alto, 25-27 cm de ancho y hasta 35 cm de profundidad. Es importante tener en cuenta que las grasas, el agua y otras sustancias presentes en los alimentos absorben estas ondas para calentar la comida en su totalidad. En otras palabras, no es posible cocinar alimentos desde el interior en un horno de microondas, por lo que se recomienda especialmente para caldos y recetas que no involucren capas o rellenos exteriores.
3- Horno clásico y multifunción
El horno ventilador multifunción cuenta con un ventilador en su pared que distribuye el calor de manera uniforme. Esta característica permite lograr una cocción más rápida y uniforme a temperaturas menos agresivas en comparación con un horno de convección convencional. Además, la función de calor giratorio facilita la preparación de varios platos simultáneamente, ya que ofrece la posibilidad de utilizar hasta 3 niveles diferentes.
Dentro de los hornos de calor giratorio, se distinguen dos tipos:
- Horno de Calor Mixto: En este caso, el ventilador opera al mismo tiempo sobre una resistencia inferior y una resistencia superior, generando lo que se conoce como calor ventilado.
- Horno de Calor Forzado: Aquí, el ventilador funciona con la ayuda de una tercera resistencia, proporcionando un sistema de calor adicional. Este tipo de horno ofrece ventajas específicas en términos de distribución y control del calor durante el proceso de cocción.
4- Horno de vapor
Se ha convertido en un horno diferente al tradicional, gracias a que el mismo viene acompañado de vapor. En cierta manera se puede decir que el horno es una evolución del clásico debido a que a través del vapor permite hacer una cocina saludable.
Este horno apuesta por el vapor seco para realizar los diferentes platos. Es un horno que permite realizar alimentos libres de grasas, a la vez que ayuda a conservar los nutrientes y las vitaminas. Es una opción interesante para las personas que buscan algo eficiente y sobre todo saludable.
5- Horno de convección
Es otro de los más conocidos porque a pesar de que ocupan bastante espacio, son hornos que se elaboran para mantener la temperatura constante y así certificar que los resultados serán óptimos en todo momento. Dentro de estos hornos se pueden elaborar una gran cantidad de alimentos.
Características de un buen horno
Analizando el mercado de los electrodomésticos nos damos cuenta de que el horno es de los electrodomésticos más vendidos. Casi todas las cocinas industriales y domésticas cuentan con un horno.
Sabiendo que el horno es de los electrodomésticos más comunes en las cocinas, es importante elegir uno de calidad. Para ayudarte a elegir la mejor opción te vamos a mostrar una serie de características que debería tener el horno.
Tamaño del horno
Podemos encontrar diferentes tamaños de horno, dependiendo de las necesidades se deberá elegir entre una u otra opción.
- Pequeño horno: los hornos más pequeños, con capacidades menores a 48 litros, suelen ser utilizados en minihornos y en hornos compactos de pie. Estos modelos, diseñados para ocupar un espacio reducido, suelen ser instalados comúnmente en la encimera o en estanterías. Actualmente, también hay opciones de hornos empotrables que ofrecen eficiencia y ahorro de espacio.
- Horno mediano: los hornos empotrados que se encuentran comúnmente en cocinas integrales tienen un volumen estándar que oscila entre 48 y 60 litros. Son los más comunes y resultan adecuados para hogares con capacidad para albergar entre 2 y 4 personas. Estas dimensiones permiten una versatilidad en la preparación de alimentos, adaptándose a las necesidades de las familias de tamaño medio.
- Horno grande: son los hornos empotrables con una capacidad superior a 60 litros, te alegrará saber que muchos de ellos vienen equipados con 2 o 3 cavidades. Esta característica permite cocinar varios platos a la vez, ideal para hogares con familias numerosas o para entusiastas de la cocina con una cocina espaciosa. Estos hornos de gran volumen brindan la versatilidad necesaria para satisfacer las necesidades de quienes disfrutan de preparar comidas variadas y abundantes.
Sistema de limpieza
Limpiar un horno a mano no es la tarea más agradable. Aparte de los hornos convencionales que requieren ser lavados manualmente, hay dos métodos automáticos para la limpieza de los hornos empotrables.
En el caso del sistema de limpieza catalítica, el desengrase se lleva a cabo automáticamente durante la cocción cuando la temperatura alcanza los 200°C. Después de este proceso, sólo quedan algunos residuos de azúcar y jugos, los cuales pueden eliminarse fácilmente con una esponja.
Por otro lado, el método de limpieza por pirólisis implica que la temperatura del horno se eleve hasta los 500 grados, eliminando así todos los restos de comida. Este sistema es considerado el más eficiente en autolimpieza.
Además de estos, existen otros enfoques de limpieza, como la limpieza con vapor, que no solo es económica sino que también ayuda a eliminar manchas. Recientemente, ha surgido en el mercado una nueva tecnología que combina lo mejor de la pirólisis y la catálisis, ofreciendo una alternativa innovadora para mantener los hornos impecables.
Opciones extra del horno
Los creadores de hornos están compitiendo con astucia para ofrecer características de alta tecnología. Además de las funciones básicas de cocción y limpieza, hay muchas opciones disponibles para hacer tu vida más fácil en la cocina o cocinar como un profesional.
Específicamente, hay hornos con recetas preprogramadas, cierre suave y puerta retráctil, entre otras características. La seguridad de la puerta fría es especialmente útil si tienes niños, ya que ayuda a prevenir posibles quemaduras. Otra innovación ingeniosa es el cajón calentador que se coloca debajo del horno para mantener aperitivos, carne o gratinados calientes sin necesidad de continuar cocinando.
Al igual que otros electrodomésticos de cocina, los hornos cuentan con una etiqueta energética. Aunque los hornos consumen poca electricidad debido a su breve tiempo de uso, a diferencia de los frigoríficos que están en funcionamiento las 24 horas, se recomienda elegir un horno con una calificación energética mínima de A. Esto garantizará un menor consumo de energía y un rendimiento más eficiente.